En el mundo de las novias muchas cosas están cambiando y cada vez más encontramos una gran diversidad en el tipo de ceremonias, vestidos y, como no, peinados.
Hasta hace unos años existía un patrón de lo que debía ser una boda, afortunadamente, ahora no. Por eso no es extraño que algunas mujeres opten para su gran día por llevar el pelo suelto, ¿por qué no? Se trata de sentirnos bien y respetar nuestra personalidad.
Uno de los looks más bonitos para llevar el pelo suelto es una melena con ondas al agua, como las que llevaban artistas como Rita Hayworth o Marilyn Monroe con distintos largos. Con este acabado tan pulcro, además de ofrecer una imagen preciosa y sofisticada, el peinado queda fijado sin apenas movimiento, permaneciendo intacto durante toda la boda.
Para aquellas a las que les gusta la naturalidad, las melenas largas con ondas suaves son muy favorecedoras y pueden conseguir darle un twist simplemente colocando una diadema floral sobre la frente, a modo de tocado, evitando así que el pelo moleste en la cara.
También podemos optar a un semirrecogido en un lateral de la melena con un accesorio joya como una horquilla con perlas o diamantes, dejando el flequillo caer sobre la otra parte del rostro. El resultado es muy sensual e ideal para aquellas novias a las que les gusta ser muy femeninas. El acabado del resto de la melena se puede adaptar al estilo de cada novia, desde unas ondas pulidas, a un efecto beachy, pero siempre dando fluidez.
Después tenemos a las novias más sofisticadas, aquellas que lo apuestan todo con su imagen, y se deciden por una imagen poco convencional, aunque muy favorecedora y de tendencia: el efecto wet. Para conseguirlo nos peinaremos hacia atrás y dejaremos que de medios a puntas no quede tan fijado. Podemos recogernos un lado con una minitrenza que queda cogida bajo la melena o con un accesorio joya que vaya con nuestro estilo.
Y las novias también pueden ir con pelo corto o con bobs, dos de las tendencias más inspiradoras para las novias. En el caso de llevar un pixie o un corte a lo garçon, no hace falta ningún complemento en el pelo, simplemente con unos buenos accesorios como pendientes el look queda sorprendente y tan femenino como una larga melena. Lo mismo sucede con un bob que deja al descubierto también la zona del cuello y la nuca, y que podemos llevar con unas leves ondas con la raya en medio o a un lado, según nuestras preferencias.
Aunque me encantan los recogidos, ¡me declaro fan de las novias con el pelo suelto!
